siendo la primera investigación de mobbing realizada en España, con una base de 1000 personas encuestadas. El llamado cuestionario Cisneros II, plasma por primera vez los tipos de conducta agresiva laboral más usuales. En éste estudio se pueden observar por primera vez las consecuencias en forma de daños, sobre la salud mental y física de las personas que han sufrido ésta lacra laboral.
La escala Cisneros es un cuestionario desarrollado por el profesor Iñaki Piñuel de carácter autoadministrado compuesto por 43 ítems que objetivan y valoran 43 conductas de acoso psicológico. Dicho cuestionario forma parte del Barómetro CISNEROS® (Cuestionario Individual sobre PSicoterror, Negación, Estigmatización y Rechazo en Organizaciones Sociales), integrado por una serie de escalas cuyo objetivo es sondear de manera periódica el estado, y las consecuencias, de la violencia en el entorno laboral de las organizaciones. En un trabajo se estudió la fiabilidad, validez y dimensionalidad de la escala Cisneros, empleando datos obtenidos en una muestra de 1.303 trabajadores pertenecientes a un gran número de sectores de actividad. Los resultados indican que la escala Cisneros tiene una elevada fiabilidad una estructura bidimensional que permite ordenar sus ítems a lo largo de dos dimensiones (Ámbito de la conducta de acoso y Tipo de conducta de acoso), y que presenta relaciones teóricamente esperables con escalas que miden Autoestima, Burnout, Depresión, Abandono profesional y Estrés postraumático. Los resultados obtenidos muestran una buena capacidad para discriminar entre diversos grados de acoso y, por consiguiente, la utilidad de la escala como indicador de la gravedad e intensidad del daño infligido a la víctima. (6)
METODOLOGÍA:
Se ha realizado una revisión del tema exhaustiva, mediante la búsqueda bibliográfica del tema en varias bases de datos.
RESULTADOS y CONCLUSIONES: En el informe Cisneros, se hallaron algunas conclusiones, (7) que pueden ser de utilidad:
– Uno de cada 3 trabajadores en activo, confiesa haber sido víctima de agresiones psicológicas a lo largo de su vida laboral.
– Los autores de éstas agresiones psicológicas son en un 79,39% de las veces, los jefes más inmediatos; en un 26,06% los propios compañeros, y en un 3,55% los subordinados.
– Más del 16% de la población española reconoce ser víctima de mobbing durante los últimos 6 meses con una frecuencia semanal.
– Dos de cada tres trabajadores timas de mobbing no son conscientes de estar siendo víctimas de acoso.
– Más del 50% de las víctimas, manifiestan secuelas del acoso laboral.
– La mayoría de los compañeros de trabajo, no mueven apenas un dedo para ayudar al compañero agredido. Sólo en un caso de cada seis, hay un apoyo frente al agresor.
– El mobbing afecta tanto a hombres como a mujeres, y se calcula que hay más riesgo en el sexo femenino.
– En el exterior la situación no es más atractiva. En Europa, según un estudio realizado en 2002, el porcentaje de trabajadores que estaban sufriendo, acoso psicológico en su trabajo, eran del 33%.
En un estudio de la British Medical Journal, en 2011, se pone de relieve que un 38% de trabajadores ha manifestado sufrir mobbing, mientras que un 42% confiesa haber sido testigo de casos de acoso.
CONSECUENCIAS DEL MOBBING: Se (8) han demostrado efectos nocivos del mobbing sobre las personas, las organizaciones y la sociedad. Gran parte de estudios indagan sobre los que se centran en los efectos sobre las personas. Entre otros efectos genera: depresión , ansiedad, desesperación, ira (Leymann, 1990), insomnio, síntomas nerviosos, melancolía, apatía, falta de concentración, agresividad, fobia social, estrés, trastorno del sueño, cambios en la personalidad, síndrome del estrés post-traumático, (Piñel 2001), problemas psicológicos, trastornos psicosomáticos, (Mikkelsen y Einarsen, 2002) y suicidios (Leymann, 1990). En el entorno social y familiar, se evidencian tensiones y conflictos, retraimiento de la víctima hacia sus familiares, (Piñuel, 2001), aislamiento social, inadaptación social, entre otras consecuencias.
En las organizaciones, las principales consecuencias asociadas con el mobbing, son entre otras: la disminución de productividad y compromiso, absentismo por enfermedad, insatisfacción en el trabajo, mayor rotación de personal, intención de dejar el puesto, costos de producción más elevados, disminución de la motivación, bajas laborales continuas y reducción forzada de la jornada laboral (Piñuel 2001).