Atención en salud a la población en situación de desplazamiento
RESUMEN
El fenómeno del desplazamiento causado por la violencia es un problema histórico que afecta a las poblaciones tanto desplazadas como receptoras de dicha movilización. En Colombia, ya son más de 4 millones de personas las que han tenido que dejar sus tierras y buscar refugio en otras regiones, teniendo que organizar su vida y las de sus familias en condiciones muchas veces adversas y diferentes a su cultura y costumbres.
Atención en salud a la población en situación de desplazamiento en la IPS policlínico “Juan Atalaya” Imsalud Cúcuta norte de Santander Colombia.
Alberto Ochoa Govin ([1]). Andrea Juliana Duarte Aranda (2), Leidy Johana Estrada (3), Margarita Cárdenas (4), Sandra Gutiérrez (5), Germán Duran (5), Wilson Giovanni Jiménez Barbosa (6).
[1] Médico Neurocirujano Especialista en Gerencia y Auditoria de la Calidad en Salud Universidad Jorge Tadeo Lozano Bogotá Colombia.
2 Administradora de Empresas Especialista en Gerencia y Auditoria de la Calidad en Salud Universidad Jorge Tadeo Lozano Bogotá Colombia.
3 Bacterióloga Especialista en Gerencia y Auditoria de la Calidad en Salud Universidad Jorge Tadeo Lozano Bogotá Colombia.
4 Fisioterapeuta Especialista en Gerencia y Auditoria de la Calidad en Salud Universidad Jorge Tadeo Lozano Bogotá Colombia.
5 Odontólogos Especialistas en Gerencia y Auditoria de la Calidad en Salud Universidad Jorge Tadeo Lozano Bogotá Colombia.
6 Odontólogo, Universidad Nacional; Magíster en Administración, Universidad de la Salle; Candidato a Doctor en Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, Universidad de Manizales; Docente Postgrados Área de Gestión de la Salud y la Seguridad Social, Universidad Jorge Tadeo Lozano Bogotá. Colombia.
Según Ramírez (2003), el desplazamiento forzado “es un fenómeno, que como su mismo nombre lo indica, consiste en el abandono del lugar de residencia de una manera obligada y demasiado violenta, para ir a habitar en un lugar, en la mayoría de los casos, completamente extraño y ajeno a su estilo de vida” (p.6). Desplazarse no es sólo dejar una casa o una vereda abandonadas. Las consecuencias del desplazamiento forzado son muchas, dejan efectos sociales, culturales, demográficos, psicológicos, económicos y de salud pública en general siendo devastadores para el desplazado y para el país.
La población en situación de desplazamiento trae consigo la tragedia de la persecución, de la expulsión, del abandono de sus tierras y sus pertenencias, del temor de perder sus vidas; a una región que en muchas ocasiones no conocen pero en la que necesitan asentarse para sobrevivir.
La falta de recursos económicos y de actividad laboral acrecienta su situación haciéndola vulnerable no solo a los efectos psicológicos, sino también a los efectos físicos, por lo que son susceptibles al contagio o padecimiento de enfermedades que requieren urgente atención y tratamiento.
Para ello, la atención en salud a la población en situación de desplazamiento debe darse desde la red pública tal como lo expresa la ley 122 de 2007 en su artículo 14 literal i., siempre y cuando ésta se encuentre debidamente inscrita en el Registro Único de Población Desplazada y presente la carta declaratoria de su condición, avalada por las entidades públicas correspondientes.
De esta forma, la población desplazada tiene acceso a los servicios de urgencias, hospitalización, cirugía y consulta externa en los sitios de llegada, dentro del modelo tradicional de prestación de servicios que ofrece el Estado.
Posteriormente, la pretensión de todo desplazado es la de lograr su ingreso al SISBEN y, con esto, acceder a los beneficios del plan obligatorio de salud subsidiado; no obstante, en realidad no todos los desplazados acceden a los servicios de salud como es de esperarse, ya que existen factores asociados al Sistema de Seguridad Social y al Sistema de Atención en Salud que afectan la buena atención de la población como lo determina la ley.
Es así como se aborda en el presente escrito el estado de la atención básica en salud, realizada directamente al interior de las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud, para lo cual se tomó el caso particular de la situación que se da en la sede de IMSALUD, IPS Policlínico de Juan Atalaya a la población en situación de desplazamiento.
PALABRAS CLAVE: Atención en Salud; Calidad; Población en situación de Desplazamiento; accesibilidad y continuidad en el servicio.
LA POBLACIÓN EN SITUACIÓN DE DESPLAZAMIENTO Y LA ATENCIÓN INTEGRAL DADA POR EL ESTADO
Colombia es uno de los países del mundo con el mayor número de desplazados internos, como consecuencia principalmente del enfrentamiento armado. Autores como Ibáñez (2008) mencionan que al país como el segundo en el mundo en número de desplazados después de Sudán.
Según cifras de Acción Social de la Presidencia de la República, aproximadamente 3,9 millones de personas hasta noviembre del 2011, se encontraban en situación de desplazamiento, cifra que equivale a un 8,41% de la población estimada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) para el mismo año. (Ibáñez 2007)
La ONG Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (CODHES) considera que la cifra real de desplazados por el conflicto armado interno desde mediados de los años 80 supera los 5 millones de personas. El desplazamiento, que implica la vulneración de múltiples derechos, se generó masivamente durante 2011, alcanzando la cifra de 259.146 personas. (CODHES 2012)
En el mismo informe de CODHES, se evidencia que Colombia retoma el camino del reconocimiento de los derechos que se inicia con la Ley 387 de 1997 y se consolida con la jurisprudencia y las actuaciones de la Corte Constitucional en materia de victimización y desplazamiento forzado y de la Corte Suprema de Justicia mediante la Sentencia T-025 de 2004.
Además de la pérdida de tierras, activos económicos y vínculos con su entorno (Ibáñez, 2008), un grave problema de las víctimas del desplazamiento es la pérdida de garantías de sus derechos fundamentales. Otro hecho asociado a la precaria atención de los desplazados es el sub-registro en el Registro Único de Población Desplazada – RUPD, cercano al 30%; es decir, que tres de cada diez hogares desplazados no reciben ayuda del Estado o internacional porque no están registrados o están