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Cuidados de Enfermería en la ventilación mecánica no invasiva (VMNI)

síndrome de Arnold Chiari, etc).

  • Destete fallido de la ventilación mecánica convencional.
  • Terapia paliativa en pacientes con indicación de intubación orotraqueal (IOT).
  • Otras: malformación de la caja torácica, síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS), fibrosis pulmonar, cifoescoliosis, edema de glotis etc.

Contraindicaciones (7,8):

  • Parada respiratoria.
  • Paciente inestable hemodinámicamente.
  • Paciente agitado o poco colaborador.
  • Indicación de intubación orotraqueal.
  • Incapacidad para proteger la vía aérea por disminución del nivel de conciencia.
  • Exceso de secreciones respiratorias.
  • Trauma facial, traqueostomía, quemadura, cirugía, o anormalidades que interfieran con el ajuste de la máscara.
  • Hipertensión craneal.

Complicaciones (9):

  • Necrosis cutánea por decúbito (10%).
  • Neumonía aspirativa (5%).
  • Hipotensión (5%).
  • Distensión gástrica (3%).
  • Sequedad de ojos y boca.

Ventajas de la ventilación mecánica no invasiva (VMNI) respecto a la intubación orotraqueal (IOT) (6,10,11):

  • Mayor comodidad para el paciente.
  • Menores requerimientos de sedación.
  • Conservación de la capacidad del habla y la alimentación.
  • Evita lesiones laringotraqueales.
  • Conservación de las defensas de las vías aéreas altas contra la aspiración y la neumonía.

Efectos sobre el organismo (5):

  • Reducción de la frecuencia respiratoria (FR) y aumento del volumen tidal (VT).
  • Mejora de los índices de trabajo de los músculos respiratorios.
  • Mejora de los signos de fatiga muscular.
  • Aumento de la ventilación alveolar.
  • Mejoría de la relación VA/Q.
  • Reclutamiento alveolar.
  • Aumento del volumen pulmonar inspiratorio y espiratorio.
  • Mejora del intercambio de gases.

Actuación de Enfermería (8,12):

En primer lugar, para la preparación del paciente es fundamental lograr su colaboración activa para garantizar el éxito del tratamiento. Para ello debemos presentarnos y explicarle de forma sencilla el material y la técnica que vamos a utilizar, consiguiendo establecer una interacción cuidador-paciente bien afianzada, proporcionándole seguridad y evitando generarle ansiedad, tensión o miedo, factores que dificultan la adaptación, la comprensión de la información y la colaboración en los cuidados.

Los pasos más importantes a seguir son:

  • Abordaje de la vía venosa periférica (muestras de laboratorio) y extracción gasométrica.
  • Monitorización: parámetros respiratorios, hemodinámicos y neurológicos.
  • Colocación del paciente en posición Fowler (45–60°), minimizando el riesgo de broncoaspiración, aumentando, a su vez, el volumen corriente.
  • Valorar colocación de sonda nasogástrica (SNG), sedación, etc.
  • Escoger la mascarilla adecuada y conectarla al aparato.
  • Encender el ventilador, silenciar alarmas y escoger el programa básico.
  • Parámetros de comienzo:

BIPAP: IPAP 8 cmH2O, EPAP 4 cm H2O, FIO2 necesaria para sat-90%

CPAP: comenzar con 5 cm H2O.

  • Aplicar suavemente la máscara sobre la cara hasta que el paciente esté cómodo y sincronizado con el ventilador.
  • Proteger el puente nasal con un apósito coloide para evitar erosiones o úlceras por decúbito.
  • Fijar la máscara con el arnés para minimizar las posibles fugas. Entre la máscara y la cara debe pasar un dedo.

CONCLUSIONES

La llegada de la ventilación mecánica no invasiva (VMNI) ha condicionado un cambio radical en el manejo de la insuficiencia respiratoria aguda y crónica. A lo largo de los últimos años, hemos asistido al incremento progresivo en el número de aplicaciones posibles de la ventilación mecánica no invasiva (VMNI), tanto en el ámbito hospitalario como extrahospitalario.

Su correcta aplicación en pacientes debidamente seleccionados, implica, además del beneficio para el paciente, la reducción del número de pacientes subsidiarios de intubación orotraqueal (IOT) y del ingreso en una cama de UCI, con el gasto que esto conlleva.

Se trata pues, de un sistema con gran sencillez de uso e instalación, simple, poco voluminoso, fácil de retirar y reinstaurar si fuese necesario, cuya aplicación precoz resulta determinante para la evolución del paciente. Sin embargo, para el éxito de esta técnica es imprescindible contar con un equipo suficientemente motivado y correctamente entrenado.

Realizar una información previa, concisa y concreta al paciente, así como unos cuidados de Enfermería que mantengan confortable al sujeto, resulta fundamental para obtener resultados satisfactorios.