Hemorragia Subaracnoidea Aneurismática: principios, diagnóstico y manejo
Autor principal: Dr. Daniel Eduardo Umaña Chan
Vol. XVII; nº 12; 496
Revista Electrónica de PortalesMedicos.com
ISSN 1886-8924 – Publicación de artículos, casos clínicos, etc. de Medicina, Enfermería y Ciencias de la Salud
Hemorragia Subaracnoidea Aneurismática: principios, diagnóstico y manejo
Autor principal: Dr. Daniel Eduardo Umaña Chan
Vol. XVII; nº 12; 496
Complicaciones de la hemorragia subaracnoidea
Autora principal: Herminia Lozano Gómez
Vol. XVI; nº 6; 237
Actualización en el tratamiento de la hemorragia subaracnoidea
Autora principal: Herminia Lozano Gómez
Vol. XVI; nº 6; 245
Plan de atención de enfermería en paciente con hemorragia subaracnoidea aneurismática y broncoaspiración. Caso clínico
Autora principal: Nicoleta Marieta Stefan Popa
Vol. XVI; nº 6; 271
Hemorragia subaracnoidea espontánea, a propósito de un caso
Autor principal: José Alberto Sánchez Ortega
Vol. XV; nº 10; 394
Síndrome de vasoconstricción cerebral reversible. A propósito de un caso
Mujer de 55 años que presenta cefalea hemicraneal derecha de forma brusca, no explosiva. Derivada al Servicio de Urgencias se realiza TAC que evidencia pequeña hemorragia subaracnoidea.
Ictus: incidencia, factores de riesgo y código ictus
El término ictus hace referencia al trastorno circulatorio del flujo del cerebro en el que se ve afectada de forma transitoria o permanente la función del encéfalo Según su evolución en las primeras horas hay dos tipos: el ataque isquémico transitorio y el infarto cerebral.
RESUMEN
La cefalea constituye un motivo de consulta frecuente en los servicios de urgencias. Ante un paciente que presenta cefalea es indispensable reconocer los criterios de gravedad. La cefalea de inicio brusco e intensidad elevada, con irritación meníngea orienta hacia hemorragia subaracnoidea.
La enfermedad cerebrovascular, como se tiende a denominar en la actualidad, no es un fenómeno accidental como parece indicar el desafortunado término “accidente cerebrovascular”, sino que constituye más bien el final de una cadena de eventos que se inician varias décadas anteriores, entonces encaja perfectamente la denominación de enfermedad que puede parecer súbitamente, denominada entonces “apoplejía”.